lunes, 22 de octubre de 2012

Devocional para niños basados en el Fruto del Espiritu Santo


 

       
 El gajo de la FE

 

 

Es limón es una fruta agria. Agrio quiere decir que arrugas toda la cara cuando lo saboreas. Has tomado alguna vez jugo de limón? De solo recordarlo se me llena la boca de saliva! A muy poca gente le agrada el sabor agrio del limón

Por qué crees que elegí un limón para este gajo?

Porque la fe es en mi opinión uno de los gajos más difíciles de poner en práctica. “Fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve” (Hebreos 11:1)

Esto quiere decir que tener fe es creer que lo que esperas sucederá, y esto es difícil. Sucede que estamos acostumbrados a creer solo que vemos, y cuesta mucho trabajo creer lo que no vemos!

Dios nos desafía a creer lo que no vemos!

Hace mucho tiempo, cuando Jesús estaba aún sobre la Tierra les enseñó a sus discípulos cuán grande debería ser su fe. Con que crees que la comparó para enseñarle cuán grande debería ser su fe?

No sé qué has respondido, pero te cuento que Jesús les dijo que si tenían fe como el tamaño de una semilla de mostaza, le pedirían a una montaña que se corra de su lugar de una punta hacia la otra y esta lo haría!

Sabes cuánto mide una semilla de mostaza? Tan solo 1 milímetro! Jesús dijo que si nuestra fe fuera así de pequeña cosas inmensamente grandes podríamos hacer, como cambiar una montaña de lugar.

Por qué será que eligió algo esa clase de semilla? A pesar de que es tan pequeñita, cuando es plantada en tierra, brota, y crece hasta convertirse en uno de los árboles más grandes de todo un bosque.

Esta comparación es tan significativa! Jesús nos está enseñando que con solo creerle a Él, COSAS GRANDES sucederán en nuestras vidas!

A mí me encanta decir que además de creer en Jesús, yo le creo. Le creí a Jesús cuando me dijo “serás salvo tú y tu casa” y cumplió! Le creí cuando me dijo que “yo vengaré tus agravios”, le creí cuando me dijo “Yo guardaré en completa paz a aquél que piensa en mí” y cumplió, y lo sigue haciendo.

Hay tantas promesas que Dios quiere que creas. Están en Su Palabra.

Te animo en este día a leer una y empezar a creerle. Repítela, léela en voz alta, hazte un cuadrito con esa promesa, cuéntasela a tu alma, dile a Dios en voz alta: “Dios te creo!”

Eso es tener fe. Ese el gajo del Espíritu Santo que practicaremos esta semana.

Señor Jesús aumenta mi fe, porque quiero creerte y gozarme cuando reciba lo que me has prometido!

Dios te bendiga!

Natalia

Si no sabes dónde encontrar promesas en la Biblia, puedes pedirles ayuda a tus padres  maestros. Pero también quiero decirte que estaré preparando un listado de promesas para que tengas a mano y puedas comenzar a leerlas y creerlas.

Te ayudo con una promesa que Dios quiere hacerte hoy para que creas con tu pequeña fe:

“Entonces Jesús, mirándolos, dijo: Para los hombres es imposible, pero para Dios no, porque todas las cosas son posibles para Dios” Marcos 10:27
 
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jueves, 11 de octubre de 2012

Devocional para niños: El gajo de la Bondad (Fruto del Espiritu Santo)


 

 

El gajo de la BONDAD

 

 

Me pregunto si sabes por qué estamos hablando de gajos en vez de frutos del Espíritu Santo?

Gálatas 5: 22 y 23 dice que “el fruto del Espíritu Santo es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza”

La biblia dice que es un fruto que se demuestra con esas nueve señales. Hasta hoy, hemos estudiado las primeras cinco señales. Las recuerdas?

Quisiera preguntarte cómo te está yendo con ellas? Se están notando en tu vida? Cuáles están costando trabajo para que aparezcan y se hagan visibles en tu propia vida?

En Gálatas 5 también nos dice el apóstol que las obras del Espíritu (el amor, el gozo, la paz, etc.) son contrarias a las de la carne. Se oponen entre sí, se rechazan.

También nos dice el apóstol en ese mismo capítulo cinco,  que para que sean “notorias” las obras del Espíritu, o como los venimos llamando “los gajos del Espíritu” debemos ANDAR EN EL ESPÍRITU.

Esto quiere decir, que debemos vivir alimentando al Espíritu y no a nuestra carne. Si alimentamos al Espíritu, estaremos “andando en el Espíritu” y solitos asomarán los gajos o las obras del Espíritu en nosotros porque el trabajo de producir el gozo, el amor, la paz, la paciencia, etc. en nosotros es labor del Espíritu Santo, si está bien alimentado.

Y cómo alimentamos al Espíritu, seguro te estarás preguntando??

Leyendo cada día los consejos de nuestro Dios, hablando con Él, prestándole atención, esperando en El, recordándolo, cantándole, agradeciéndoles cada una de sus bondades, pidiéndole ayuda en momentos de necesidad, son solo algunos ejemplos de cómo podemos alimentar al Espíritu de Dios.

Pasamos al gajo siguiente?

EL gajo de la BONDAD.

BONDAD es mucho más que ser “ser buenos” o “sentir desde adentro el deseo de hacer el bien” como lo explicamos cuando estudiamos la BENIGNIDAD.

La BONDAD es un paso más, es “hacer el bien” “hacer lo bueno” como por ejemplo cuando te acercas a tu hermana porque se le derramó el vaso de leche y le ofreces el tuyo, o cuando le prestas tu paraguas a su amigo que se está mojando, o cuando le das ropa a algún niño que necesita.

La Palabra de Dios nos recuerda en el salmo 31:19

“Tú eres muy bondadoso con la gente que te honra; a la vista de todo el mundo derramas tu bondad sobre los que en ti confían”

Piensa dos hechos en los cuales alguien haya mostrado BONDAD contigo

1.

2.

Y ahora piensa dos acciones bondadosas que puedas hacer esta semana con alguien.

1.

2.

Recuerda que la BONDAD se dejará ver en tu vida si tienes al Espíritu Santo bien alimentadito! =)

Dios te bendiga!